Autodemostración de nada

Ruido de mar
esperpento mi porvenir
habito la chabola del niño que fuí
ruinas preciosas ante mis ojos
ayeres destruidos
regreso del desierto,sin saber si quiero regresar.
Devoro golosinas,sin pensar ni contar
a la vez para olvidar y recordar
consigo estar en hoy
y viajar desde la chabola hasta el desierto
varias veces......olvidando....recordando....

Bebo el jarabe libiado por mí
de la flor más delicada que eres tú,
más delicada que eres tú.
En el agua hago un resumen
de mí,recapitulando
para enseñarme lo que fuí.
Juego a Narciso con Narciso y consigo atraparlo
soy un ego desarmado
cazador y cazado
mi sentir es desorden
desastre mi corazón a oscuras
esperando la luz de la sonrisa,niña perdida,
corro desordenado huyendo de Cronos sin conseguirlo.

Me tumbo bocarriba y cierro los ojos
un jacinto flota en el agua verde oro viejo de la memoria
estanque.
Narciso y Cronos se van de la mano
una cala blanca se aproxima despacio a la deriva
chocando dulcemente con otras plantas hasta rozarme los labios
no me doy cuenta que tu susurro ha llegado al puerto de mis besos
la cala eres tú.

Bebo el vino del amor
y me disuelvo en él contigo
por los vericuentos del vivir
llegamos a un falso final
actor disfrazado de muerte que sonríe y nos dice adiós
adivinando las miserias que pensamos.

Cuentacuentos sin público
afanado en el sueño
de mirarte sin arte
sólo para verte desnuda
y besar el ruido del mar
para nada.

Carlos Desastre.
"El Corsal desastre-Radio ensueño"